Aprende a preparar la salsa blanca para pasta, una de las más rápidas y sencillas que existen y que también podrás utilizar para una gran cantidad de comidas.

Origen de la salsa blanca

Salsa blanca para pasta

La salsa blanca, también conocida como bechamel, no tiene un origen cierto, ya que son muchos los que quieren atribuirse su invención. Así por ejemplo los italianos dicen que fueron los cocineros de Catalina de Medici procedentes de Florencia, los inventores de la misma cuando viajaron hasta Francia para preparar el menú de boda de la reina con Enrique II de Orleans. Pero lo cierto es que no hay ningún documento que pueda avalar esta teoría.

Otra versión dice que su descubridor fue el marques de Bechamel, administrador de la corte del rey Luis XIV. Se dice que este noble la inventó para acompañar los platos de bacalao que quedaban demasiado secos, pero la verdad es que tampoco existen pruebas feacientes de ello.

Salsa blanca para pasta

Receta de salsa blanca para pasta

La salsa blanca es una salsa muy sencilla y versátil, siendo normalmente la que todo el mundo se lanza a preparar cuando es principiante. Esta salsa resulta deliciosa en varios platos, especialmente los de pasta, pero también los de verduras y pollo. Pero desde luego también es la base para platos mucho más complejos como los soufflés. Hoy vamos a empezar por algo fácil y vamos a aprender a preparar nuestra propia salsa blanca para pasta.

Ingredientes

  • 2 cucharas de mantequilla
  • 3 cucharas de harina
  • 1 taza de leche
  • Sal y pimienta al gusto
  • Nuez moscada

Preparación de la salsa blanca para pasta

  1. En una cacerola se pone la mantequilla a fuego bajo para que se vaya derritiendo. En otro cazo se va calentando la leche y se deja hasta que esté a punto de hervir, momento en que se retira del fuego.
  2. El siguiente paso será incorporar a la mantequilla ya derretida, la harina. Hay que hacerlo poco a poco e ir removiendo con una cuchara de madera de manera continua, hasta conseguir una consistencia cremosa.

    Salsa blanca para pasta

    No dejes de remover hasta conseguir una salsa cremosa

  3. Cuando lo hayas conseguido, es el momento de ir agregando poco a poco la leche hervida. Es muy importante que la misma se vaya agregando muy poco a poco, sin dejar de remover como se hizo con la harina, ya que de lo contrario se formarían grumos en la salsa. Continua removiendo hasta que comience a hervir y empiece a espesarse. Sigue removiendo durante dos minutos más aproximadamente.
  4. En el momento en que la salsa blanca o bechamel esté lista, se retira del fuego y se añade sal y pimienta al gusto. Si quieres también puedes añadir un poco de nuez moscada para darle un toque exquisito.
  5. Ahora solamente te queda preparar la pasta. Para ello llena una cacerola con agua y una pizca de sal y cuando comience a hervir, añade la pasta que prefieras. Deja cocer según las indicaciones del fabricante. Cuando esté lista, escúrrela y colócala en una fuente. Echa por encima la salsa blanca, y ya tienes listo un delicioso plato que encantará a todo el mundo.Salsa blanca para pasta

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